1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).

2. Engrasa un molde para pastel y espolvorea con harina.

3. En un tazón, mezcla 250 ml de Baileys Irish Cream, 200 g de azúcar y 200 ml de agua fría.

4. Agrega gradualmente 300 g de harina para pastel y mezcla hasta obtener una masa suave.

5. Vierte la masa en el molde para pastel preparado y distribuye uniformemente.

6. Coloca las frutas frescas encima de la masa.

7. Hornea el pastel en el horno precalentado durante aproximadamente 45-50 minutos, hasta que esté dorado y al insertar un palillo salga limpio.

8. Retira el pastel del horno y deja que se enfríe por completo antes de desmoldarlo.

9. Espolvorea con azúcar glas y sirve.