1. Lava y seca la pechuga de pollo.

2. Sazona con sal y pimienta.

3. Corta los tomates en rodajas.

4. Corta la mozzarella en rodajas.

5. Calienta una sartén y agrega un poco de aceite.

6. Dora la pechuga de pollo por ambos lados hasta que esté dorada y cocida por completo (unos 6-8 minutos por lado).

7. Retira la pechuga de pollo de la sartén y mantenla caliente.

8. En la misma sartén, saltea brevemente las rodajas de tomate hasta que se ablanden.

9. Coloca las rodajas de tomate sobre la pechuga de pollo.

10. Coloca las rodajas de mozzarella sobre las rodajas de tomate.

11. Cubre la sartén y deja que la mozzarella se derrita a fuego lento hasta que esté suave (unos 3-4 minutos).

12. Decora con albahaca fresca y sirve.